Hace casi nada salí con un hombre de 40 años... yo tengo 25.

Fue la mejor cita de mi corta vida (Corta a comparación de).

No paramos de hablar por dos días, él me contó de su divorcio, yo le conté sobre mi vida mientras nos besábamos en los intermedios. Él me tocó tal vez sin proponerselo el corazón y todo terminó en el transcurso de dos semanas y dos días. Las razones... son solo mías y de él.

Lo importante aquí es que en ese momento me vi a mi misma con muchos sentimientos en la mano y nadie a quien dárselos. Él desapareció en silencio; sin una palabra de reproche o de agradecimiento... en medio de ese silencio, fui yo quien escribió el adiós, buscando tal vez, una manera de dejarlo ir.

Que termino tan complejo ¿No creen? "Déjalo ir" "Pasar la página" y por último "OLVIDAR". Son cosas de las que todo el mundo habla, pero nadie en realidad te aclara que significan.

Nadie te dice que cuando le dices adiós a alguien la famosa "tusa" surge como un proceso en el que tu cuerpo, tiene que entender que esa deliciosa hormona del amor no va a generar más de aquella sustancia... y te encuentras llorando a otro, cantado Jose Jose, Chavela Vargas, Vicente, El Binomio de Oro entre muchas otras dependiendo de tu preferencia musical.

A veces te despiertas tranquilo; otras veces no duermes en toda la noche, otros días te duermes llorando, con el televisor prendido y el celular apagado, escondido en un cajón lejano a tu alcance, para evitar ver que su ultima conexión fue hace un minuto y que todavía no te habla, te busca, te extraña.

Sales con tus amigos, conoces nuevas personas, que solo te recuerdan aun más a aquella que tienes clavada en el pensamiento, hablas de él/ella con tu mejor amiga, con el portero, con el taxista... o no hablas de él/ella en absoluto para evitar pensar, en algo que ya estás pensando y que en contra de tu voluntad sigues teniendo adentro.

Todo va cambiando con los días... todo se va "esclareciendo" y de alguna manera llega un punto donde ya no rezas más para que te busque y dejas de cantar a grito herido "ME VA A EXTRAÑAR" y "TE VOY A OLVIDAR". Te levantas y te das cuenta que tienes hambre, escuchas música y ves películas, sin recordar su nombre.

Cuando piensas en él/ella, viene a ti esa sonrisa suya, su manera de mirar y en contra de lo que en algún momento hubieras pensado TÚ SONRÍES, lo dejas transitar en tu mente con tranquilidad, tus pulmones lo respiran y tu boca lo exhala sin mirar atrás.

Pero en todo este proceso de "Dejarlo ir" y "pasar la página" nadie te aclara una cosa: tú a ese personaje nunca lo vas a olvidar (aplicando la definición más exacta de la palabra). Ni tú ni nadie, tiene el poder de borrar a una persona de la memoria, la única cosa que puede lograr hacer eso se llama alzheimer y es una enfermedad. Pero lo que tampoco te dice nadie es que eso no está mal, sino todo lo contrario.

Cuando en verdad le abres el corazón a alguien, cuando tú le concedes el permiso (porque eso es algo que se decide dar) a otra persona de entrar y en verdad conocerte; siempre va a quedar algo de él/ella en ti, como va a quedar de ti en él/ella. Nadie "olvida" a una persona que de verdad lo tocó por dentro y eso es una aclaración MARAVILLOSA que se debería CELEBRAR.

Pues lo único que DE VERDAD va a pasar si te preocupas por vivir un duelo de despedida sano, es que con el tiempo, recordarás a esa persona por siempre, pero sin ningún dolor.

No intentes olvidar a ese/esa que te hirió, perdónalo (a).

No te atrevas a desear que él/ella nunca hubieran pasado por tu vida, por fue por él/ella que viviste momentos increíbles, llenos de felicidad, de ternura, de risa, de pasión así fueran cortos... fue lo que sentiste por él/ella lo que te mostró partes de tu ser que tenías olvidadas o que ni siquiera conocías y cuando llegó el final (sea como sea que haya llegado) fue gracias a esa persona que aprendiste algo más.

Por muy pequeño o grande que haya sido esa lección, aferrate a ella... cuando llegue el momento adecuado será una de las razones que te alentarán a volverlo a intentar.

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